Traemos para el blog de La noche en blanco de Granada, los versos de la poeta Remedios Álvarez, que se incluyen en la sección de Poesía para la noche en blanco de Granada.
LOS VERSOS DE REMEDIOS ÁLVAREZ
EN LA NOCHE EN BLANCO DE GRANADA
Aunque Remedios
Álvarez Díaz, nacida en 1959, tienen un currículo medianamente extenso con
respecto a su labor literaria; aunque pertenece al grupo “Poética en Gredos”,
ha recitado en multitud de eventos poéticos nacionales y en festivales
internacionales, muchos de sus poemas están publicados en diversas antologías
como “Versos de Seda-Flor de almendro”, publicada por la Diputación de Granada;
I y II Antología de “Poetas Andaluces de Ahora”, Antología 100 poetas
Internacionales publicada por
“aBrace/Letras”(Uruguay), Antología Internacional “Poesía,
Cuentos y Vos 2013” en Buenos Aires... y ha publicado un poemario “si no fuera
por la necesidad de ...” (ediciones Celya) ella prefiere apuntarnos otros
aspectos:
Del tiempo de su pasar, de los acontecimientos…
me voy revelando sabiéndome definir.
Por
nacimiento: malagueña y mi edad la sabré cuando muera, porque, como nos dice
Jorge Bucay en “El Buscador”, “... y sumar
el tiempo de lo disfrutado para escribirlo sobre su tumba. Porque ese es para
nosotros el único y verdadero tiempo vivido”;
por mi
condición en las listas:“el cuarenta y uno” de los cuarenta principales;
por mi
aparición en las clases: “la profe”;
por
estatus social: proletaria;
por mi
trato con los bancos: hipotecada;
por mi
existencia entre poetas: de arte menor con rima asonante;
por mis
publicaciones: antologada y a partir de ahora “librada”;
y con
respecto a los de mi especie: en peligro de extinción.
CORYPHANTHA (flor blanca del desierto)
I
La arena atrae
la notas
no te deja dormir
araña
envuelve
se incrusta,
no es tuya pero la llevas.
¿por qué me haces soñar con
dunas?
¿No ves que soy ceniza y
ascuas
que me embriaga moldear la
tierra cuando se despide el sol
y sentir el fresco de las
constelaciones?
La arena seduce
acaricia
se amolda a tu cuerpo
dibuja huellas
te adormece
pero...
calcina o hiela.
Si los espejismos vuelven
y me llevan por senderos
inciertos
no moriré de sed, como crees,
crecerán espinas de cada
grano
de esa arena que no es mía
pero que se niega a dejarme.
II
El agua no deshace la arena
la deja en el lugar de donde
vino.
Quién responderá a mis
súplicas
cuando el aire seque mi
cuerpo;
allá quedarán los despojos
y el silencio se hará dueño
de las quejas.
Será el grano intacto, tras
el cristal fundido,
el que indique la hora del
crepúsculo.
No habrá mano que voltee al
tiempo.
Sólo convertida en polvo
comprenderé el secreto de
las dunas.
III
Cómo quema el desierto
todos los seres que la aman
envenenan o espinan;
la metamorfosis está cerca,
no hay corazón que aguante
el amor-odio de los
contrarios.
No moriré de sed,
crecerán espinas de cada
grano.
Ya no sabré de miedos.
Serán otros los que callen
tan sólo sospechar mi
presencia.
IV
Aún así, no me dejes dormir
tatúa mi cuerpo
hazte notar, sedúceme
y seré tuya, aunque me
pierda.
Serás presente eterno
cuando el último grano selle
los labios del tiempo.
V
Cuando la lluvia empape mi
cuerpo
agradeceré a los dioses la
ventura con una flor blanca.
Acaso quedó una gota de
sangre amable;
mas, quién destruya la pureza
no dejará de buscar la
arena.
Remedios Álvarez
Los mil rostros de la noche. Ella, como la piel, guarda memoria.
ResponderEliminarBonito comentario. Gracias, Juan Antonio.
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